
Últimamente llega gente a consulta que quiere pasar rápidamente por lo que esta viviendo. Me dicen que no quieren pasarlo mal en la terapia, que quieren consejos y palabras que les ayuden a pasar este mal trago. Habitualmente suelen preguntar cuánto va a tardar la terapia. Que necesitan volver con su "vida normal".
¿En qué consiste la terapia? ¿Cómo saber si estamos haciendo terapia o algún otro tipo de acompañamiento? ¿Cuál es la terapia que más me conviene? Muchas son las preguntas a las que nos enfrentamos la primera vez que hacemos un trabajo terapéutico y muchas son las dudas acerca del saber si estamos o no haciendo un trabajo correcto.
Me llaman la atención aquellas terapias o encuentros en los que el terapeuta nos aconseja y habla por nosotros, diagnostica y analiza. Es muy fácil, piensa uno como profesional, decir lo que "cree que el otro debe oír", mostrarle nuestro arsenal de frases de "Facebook" y hacer que su prurito mental quede satisfecho. Pero no es así, ni tampoco debe ser así.